Los tres temores más apremiantes en la planificación del retiro
El principal temor de la mayoría de la gente al planificar su jubilación es vivir más tiempo del que le durarán sus ingresos. Si bien siete de cada diez trabajadores afirman tener confianza en la planificación que han hecho para vivir de manera cómoda durante la jubilación, es posible que muchos no estén preparados para ciertos riesgos que podrían amenazar la suficiencia de sus ingresos de por vida.
El riesgo de un evento que requiera cuidados a largo plazo
Estadísticas recientes revelan que más de dos de cada cinco estadounidenses necesitarán cuidados a largo plazo en algún momento de sus vidas, y el número aumenta a siete de cada diez después de los 65 años. Es decir que, pagar por atención médica o cuidados a largo plazo será uno de los problemas más importantes para la mayoría de los jubilados.
En muchos casos, la familia está dispuesta a brindar esos cuidados en sus casas. Pero en muchas situaciones esto se vuelve poco práctico y resulta una carga emocional muy pesada para el familiar encargado de los cuidados. En muchos casos terminan recurriendo a servicios de cuidado profesional a largo plazo.
Si bien no hay forma de evitar los costos de los cuidados a largo plazo, sí hay formas de reducir el impacto financiero que pudieran tener. La mejor solución podría ser acumular el capital adicional para cubrir el costo o transferir el riesgo a una compañía aseguradora, o una combinación de ambas, pero el activo más valioso que tenemos es el tiempo. La mejor manera de usar tu tiempo en este momento es hablar sobre cómo cubrir las posibilidades de necesitar cuidados a largo plazo y encontrar la mejor solución para pagarlos.
Riesgo de inflación
Hasta hace muy poco, la inflación no era algo preocupante para la planificación de la jubilación porque la tasa inflacionaria siempre fue muy baja. Pero este último año hemos visto cómo la tasa de inflación se ha ido por las nubes hasta alcanzar niveles nunca vistos en décadas, lo cual la convierte en una amenaza real a nuestro poder adquisitivo. Esto puede perjudicar la seguridad financera de los jubilados en sus últimos años.
No se sabe si este aumento desmedido es transitorio, como creen algunos economistas, o algo permanente que podría durar varios años, lo que sí sabemos es que esto es un llamado de atención para quienes están planificando su jubilación. Sin embargo, no es necesario que el índice inflacionario se dispare al 10% para comprender cómo impacta en nuestro poder adquisitivo con el tiempo. Incluso con una tasa del 3% de inflación, tu poder de compra puede bajar un 80%, es decir, una bolsa de mercadería que hoy cuesta $100 valdría $180 en 20 años. La inflación también puede arrasar con tus ganancias, lo cual es especialmente devastador si tienes portafolios de inversión con ingresos fijos.
Cualquiera sea el índice, la inflación siempre genera incertidumbre. Es algo esperable y podemos planificar para contrarrestarla. Para hacerlo, el tiempo es esencial.
Solvencia del seguro social
Para muchos jubilados, los beneficios de su seguro social tendrán un rol cada vez más importante en cuanto a la eficiencia del ingreso vitalicio. El seguro social fue creado como un beneficio de seguro para evitar que los jubilados vivan en la pobreza, en tiempos en los que la esperanza de vida promedio era de solo 63 años. Nadie sabía que la esperanza de vida llegaría a los 20 años y cada vez son menos los trabajadores que contribuyen a la seguridad social.
El congreso ha tomado varias medidas a lo largo de estos años para aumentar la solvencia del seguro social, como subir la edad jubilatoria, aumentar el límite salarial para los aportes y los impuestos FICA. Y aún quedan muchos factores que el gobierno puede ajustar para aumentar todavía más ese margen. Sin embargo, para quienes en este momento están camino a la jubilación (personas de 55 años o más), el riesgo de que estos cambios afecten a sus beneficios es muy bajo.
De todas maneras, siempre está bien preocuparse por el retiro. Por eso es fundamental hacer una planificación adecuada mientras tengas tiempo a favor. Planificar una jubilación segura implica focalizarte en lo que puedes controlar y generar las estrategias adecuadas para reducir tus riesgos.
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